¿Dónde anda...Nico Olivera?

Nico Olivera nació en Montevideo en mayo de 1978. Creció como futbolista en uno de los equipos de su ciudad- el Defensor Sporting- equipo con el que debutó en el año 96, y en esa temporada destacó como delantero, logrando 16 dianas en su debut en la liga uruguaya. Esta cifra le permitió viajar con el combinado sub20 de Uruguay al Mundial que se iba a celebrar en Malasia. Uruguay realizó un gran Mundial llegando a la final en la que caería por 1-2 ante la habitual campeona de este campeonato, Argentina.

En este torneo, Nico Olivera pese a ser delantero y que Uruguay llegó a la final, logró únicamente 2 tantos, pero sus actuaciones fueron espléndidas y le valieron para ser nombrado mejor jugador del Mundial. Logró el “Golden Ball” en un Mundial sub-20 en el que coincidió con una innumerable lista de jugadores hoy en día conocidos, pero destacaré a algunos como Tarik Sektioui, Pablo García, Marcelo Zalayeta, Mario Regueiro, Helton, Alex de Souza, Sagnol, Gallas, Silvestre, Henry, Trezeguet, Anelka, Mc Carthy, Appiah, Duff, Albelda, Angulo, Cambiasso, Riquelme, Aimar, Scaloni, Carragher, Owen…

El Golden Ball, que este año ha ganado Sergio Agüero, le sirvió como pasaporte para llegar a Europa, fue el Valencia quien le fichó. Llegó con jugadores como Marcelinho Carioca (36 años, actualmente jugando en el Santo André de la Serie B brasileña), o Moussa Saïb, ya retirado, los 3 resultaron un auténtico fracaso para el Valencia.

Olivera nunca llegó a anotar un gol para los de Mestalla y buscó una salida en el mercado invernal, viajó al sur, a Sevilla. En el Sevilla vivió sus mejores años, brilló en la División de Plata, logrando en 3 temporadas y media 31 goles. Abandonó el equipo cuando este comenzaba a crecer y a convertirse en un grande en 2002, y buscó fortuna en el Real Valladolid, donde realizó una discreta temporada logrando 4 goles.

Al año siguiente tuvo que viajar a Córdoba, con 25 años, el que llegaba con el galardón de que mejor jugador sub-20 del Mundo, se tenía que conformar con jugar en Segunda un año más, logró 9 goles en el Córdoba, pero volvió a cambiar de aires la temporada siguiente, quedándose en España, viajando a Albacete. Nunca llegó a funcionar en Albacete y tras 4 partidos y ningún gol, decidió viajar a donde realmente brilló, al club de su infancia al Defensor Sporting. Jugó 23 partidos anotando 10 goles y haciendo pensar a algunos que todavía tenía gol en sus botas, por lo que el Necaxa mejicano decidió incorporarle. Otro fracaso, sólo 3 goles en 16 partidos, y tuvo que volver a cambiar de aires, llegando a su actual club el Atlas, también mejicano, donde con 29 años, trata de demostrar de una vez por todas, que aquel Mundial sub-20 o aquellos días buenos que tuvo en el Sevilla no fueron un mero espejismo.