Volver a empezar...

El Valencia ha destituido a Quique Sánchez Flores hace escasas seis horas tras la reunión que tuvo lugar en la Ciudad Deportiva de Paterna entre los máximos mandatarios del club de la "rata penada". Cuando se destituye a un entrenador se escenifica el error que se ha cometido dándole su confianza pero es que además, el Valencia demuestra su nula capacidad como club al hacerlo tras toda la polémica del Verano que acabó con Carboni y varios ayudantes de Quique de patitas en la calle.

Por si fuera poco, el miercoles el Madrid visita Mestalla en el peor momento para el equipo che. No obstante, es muy probable que ese sea el motivo por el cual la cabeza de Quique ha tardado tan poco en rodar. ¿Se imaginan la que se podría haber liado en ese campo si el Valencia no hubiera hecho un buen partido? Ahora, sin la persona sobre la cual la afición descargaba toda la culpa, el ambiente será totalmente diferente y mucho más favorable al equipo de casa.

La prematura caída de Quique es una señal más de que la afición de Mestalla ejerce una muy mala influencia en el equipo debido a la presión a la que se le somete y a su injustificada y excesiva exigencia. El Valencia estaba pasando una racha realmente mala con dos derrotas en Champions y tres en Liga pero yo personalmente soy partidario de que se debería haber dado más tiempo de reacción a Quique para arreglar el desaguisado.

El año pasado el equipo estuvo plagado de importantes lesiones que no permitieron que la magnifica plantilla que lo componía brillase como es debido, aún así el Valencia finalizó en puestos de Champions y fue eliminado en Champions contra un Chelsea fantástico. Este año no ha empezado tan bien como se esperaba pero me parece un craso error destituir a un técnico sobre el cual has depositado toda tu confianza hace tan solo dos meses al despedir a su enemigo y secretario técnico del club, Amedeo Carboni. Una vez más, la directiva del Valencia demuestra su tremenda incompetencia para llevar un club de prestigio como es el de las orillas del Túria.

En estos momentos, la mente de gran parte de la afición está puesta en un sueño realmente complicado pero factible como es el ficha del Jose Mourinho por el Valencia. Un entrenador y un club pocas veces han casado tan bien como estos ya que lo que Jose quiere de un equipo el Valencia lo tiene y lo que el Valencia quiere de un entrenador Mourinho lo tiene... todo. No obstante, ante la dificultad de traer a Mourinho, el equipo queda ahora suspendido en el aire con un 15% de la temporada disputada y con la sensación de que todo lo hecho hasta ahora carece de sentido. El Valencia se juega mucho en próximas fechas y tendrán que mejorar mucho y muy deprisa para salvar una temporada que de momento parece que se les va a pique por culpa de una mala gestión deportiva. Ahora toca volver a empezar.